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Este blog es un blog sobre videojuegos, pero no un blog que intente ir de "pro" ni en el que quiera ir de "listillo" sino simplemente un blog en el que hablo sobre los juegos que, por una u otra razón, hayan quedado en mi recuerdo, aquellos que definieron mis gustos en este hobby y aquellos que pudieron haberme marcado. Aquí no hay guías, puntuaciones ni trucos, solo puro amor por los videojuegos y algún que otro recuerdo medio enterrado en la memoria, tampoco hay roms ni enlaces de descarga, para eso ya hay otras página.

lunes, 9 de octubre de 2023

Devil Dice


     

El de hoy es un caso un tanto curioso. De hecho, no sabia si ponerlo en la categoría de juegos que nunca pude jugar, porque, de hecho, lo jugué bastante, así que he decidido no incluirlo en dicha categoría, ¿y eso?, diréis algunos. Pues porque gracias a la revista PlayStation Magazine pude dedicarle horas y horas porque venía en uno de los cd con demos que regalaba la famosa revista. Y ok, era sólo una demo, pero por la naturaleza y características del juego en cuestión, en realidad, daba igual. Y hoy no voy a perder mucho tiempo con preludios ni hostias, hoy vamos a ir al grano, toca hablar de Devil Dice.

    Devil Dice es un divertidísimo juego de puzles en el que, como su nombre parece indicar, deberemos jugar con dados, pero no, no tendremos que lanzarlos ni nada por el estilo, muy al contrario, tendremos que hacerlos girar para agrupar dados que muestren la misma cara en su arte superior y, así, hacerlos desaparecer. En lugar de un cursor feo, como habrían hecho muchos otros juegos, para mover los dados deberemos manejar a un gracioso diablillo (de ahí el nombre del juego), que como si de un acróbata se tratara, podrá caminar sobre los dados haciéndolos girar a nuestra conveniencia. Como suele suceder en este tipo de  juegos, las mecánicas de Devil Dice son más complicadas de explicar que de entenderlas mientras juegas. Simplificando mucho, lo único que debes hacer es mover los dados para formar grupos del mismo color, para simplificar y ayudar al jugador (supongo) cada cara de los dados tiene un color diferente. 


Pues aquí, esperando que reaparezcan dados...

    La zona de juego, era una zona cuadrada que podía variar de tamaño según el modo de juego, siendo de 7x7 casillas, por ejemplo, en el modo "infinito", dicha área se nos muestra desde una perspectiva isométrica, lo cuál nos permite ver, en el mejor de los casos, tres caras de un mismo dado a la vez. Pero tampoco hace falta ser un genio para saber qué números hay en las otras caras, recordemos que, las puntuaciones de las caras opuestas SIEMPRE suman siete, así que si ves que un dado tiene un cuatro en la parte superior, en la de abajo tiene un tres. 

    Se pueden mover los dados de dos maneras, caminando sobre ellos, siempre que haya un espacio libre, de haber otro dado, obviamente, pasaremos a ese dado. También podemos empujarlos si estamos en el suelo... cosa que puede pasar si, al desaparecer un grupo de dados, no te da tiempo a subirte a otro... Bien pensado, sí que tiene mecánicas que, en apariencia, son más complejas que las de otros juegos... bueno, sigamos. Que en el juego se utilicen dados numerados, no es por nada, para hacer que desaparezca un grupo de dados, el número de dichos dados debe ser igual, o superior, al valor de la cara superior. Vamos, que si quieres hacer desaparecer dados que muestren el número seis, debes juntar, al menos, seis dados. Si tenéis al menos una neurona, pensaréis que lo más fácil es agrupar dados de números bajos... y en realidad no es tan buena idea como parece, ya que no sólo te dan menos puntos, sino que es más complicado hacer "cadenas"... oh, sí... "cadenas".

    Dentro de la simplicidad de la mecánica principal, el juego tiene sus complicaciones, como digo, nuestro diablillo puede caer en el suelo, lo cual no es lo mejor para nosotros, pero podemos volver a subir en un dado si nos quedamos justo encima de un dado que esté reapareciendo. Sí, los dados pueden reaparecer en algunos modos de juego. También podíamos subir a un dado que ya estuviera en el campo de juego si aprovechábamos las "escaleras" que se formaban con los dados que desaparecían. Al contrario de lo que pasa en la mayoría de juegos de puzles, aquí, las piezas no desaparecían automáticamente, sino que iban desapareciendo poquito a poco mientras descendían como hundiéndose en el terreno de juego. También se volvían transparentes y demás pero eso era meramente estético, lo importante era que mientras no desaparecieran del todo, dichos dados seguían teniendo "físicas", por lo que no podías atravesarlos, lo cual era malo si quedabas atrapado en un mal sitio, pero era bueno ya que te permitía subir sobre ellos, como digo más arriba, para regresar a dónde de verdad se parte el bacalao.


Para ser un juego de puzzles, lo cierto es que tenía efectos bastante chulos

    Otra mecánica que aprovechaba esa manera que tenían de desaparecer los dados eran las "cadenas", y que no era sino el añadir más dados a un grupo de dados que ya estén desapareciendo, lo cuál multiplicaba los puntos de manera brutal. Explicado de manera simple, debías colocar un dado adyacente a un grupo de dados que ya esté descendiendo, obviamente, con la misma cara (o número) de dichos dados. Si lo haces bien, puedes hacer multitud de cadenas, ya que mientras haya el suficiente número de dados descendiendo (que no hayan desaparecido del todo), puedes seguir añadiendo más dados, y si ves que ya le queda poco a una cadena, puedes unir un grupo más numeroso para continuarla y poder así alargar aún más la cadena. Por ello, lo mejor era hacer cadenas de números grandes, ya que seis dados tardan más en desaparecer que dos y... ¿qué?, ¿que cómo desaparecían los dados con el número uno en su parte superior?, pues de la manera más simple que os podáis imaginar. Haciendo una "cadena" con cualquier número de dados y colocando, obviamente, el uno en la parte superior del dado que quieras hacer desaparecer. Lo bueno de esto, es que así hacías desaparecer TODOS los dados que tuvieran un uno en su parte superior, lo cuál venía muy bien para hacer espacio rápido en momentos de apuro. Para completar una cadena, también podías empujar un dado desde el suelo, teniendo en cuenta, eso sí, que empujando los dados desde el suelo, estos no giraban, por lo que tenías que empujar uno que tuviera ya en su parte superior el número necesario.

    Básicamente eso era el juego, o más bien la demo que yo jugué, ya que sólo daba acceso, y por unos cuantos minutos, al modo más "simple", que consistía precisamente, en sobrevivir todo el tiempo posible haciendo puntos eliminando dados. Aunque ese modo estaba dividido en niveles, lo cierto es que no había apenas descanso entre uno y otro, la dificultad consistía en que, la reaparición de los dados era más rápida y en que tenías menos espacio libre para maniobrar, lo cuál era una locura en niveles avanzados.


El modo vs

    A parte de ese modo, también tenía otro llamado Puzle, en el cuál se te daban ciertas situaciones que tenías que resolver en un número determinado de movimientos. Este modo era de echarle más "coco", ya que aunque los primeros niveles eran muy simples, poco a poco la cosa se iba complicando.

    También tenía modo multijugador,  o más bien debería hablar en plural porque tenía dos modos multijugador. En uno de ellos debías conseguir cuatro combinaciones de diferentes números antes que el contrario. Este modo tenía la particularidad de que, si hacías una combinación que tuviera el contrario, se la quitabas a él, por lo que podía ser inteligente hacer ciertas combinaciones aunque no te puntuaran a ti. Luego estaba el modo batalla, que era una locura para cuatro jugadores (con bots o amigos), en dicho modo, debías ir restando puntos a tus enemigos (todos empezaban con cien), ganando, obviamente, el último superviviente (o eso es lo que he deducido en la única partida que jugué para probarlo XD). En este modo podías "robar" cadenas a tus contrarios si colocabas un dado del valor adecuado sobre un grupo de dados que estén desapareciendo, siendo este modo el ideal para perder amigos, lo cierto es que era muy divertido.


Este modo es muy divertido, pero es un caos absoluto XD

    Como juego de puzle que es, el apartado gráfico no destacaba especialmente, aunque sí cumplía perfectamente, además, el ser totalmente poligonal, el juego podía ofrecernos diferentes cámaras dependiendo de la situación, aunque no se utilizara mucho mientras jugábamos, sólo al inicio de los niveles y, abriendo el plano en los modos multijugador. Nuestro duendecillo, o demonio, se hacía bastante simpaticote, con expresiones divertidas y gritos de júbilo, por ejemplo,  cuando hacíamos grandes cadenas.

    Si hablamos de la música, yo diría que es agradable, frenética en algunos momentos, y que te pone en situación, sobre todo en el modo "infinito" como yo lo llamo, cuando ves cómo van apareciendo nuevos dados y no te da tiempo a hacer grupos grandes o te tapan espacios que pensabas utilizar.

    Resumiendo, un juego que aunque técnicamente estaría a la altura de un indie moderno (o incluso por debajo, ya que menudos indies hay a día de  hoy), la diversión que ofrecía (y ofrece) es mayor que la que ofrecen muchos "Triple A". Ya sea si quieres superar niveles como un loco, mejorar tu puntuación, o superar el modo puzle, este juego es para ti. Cierto que a veces el control puede ser un poco meh, a veces te bajas de un dado sin querer o no te da tiempo a subirte en uno porque te quedas enganchado en una esquina, pero no es ningún drama, nuestro diablillo es lo suficientemente ágil y rápido como para recuperar la altura sin demasiados problemas.

    Antes de despedir, recordar una pequeña anécdota que implica a los Zelda de Game Boy Color (WTF?). En dichos juegos, como buenos Zelda que eran, abundaban los puzles, pues bueno, en esos dos en particular (no se si sucederá en otros Zelda), había puzles con dados que utilizaban una mecánica similar a la de este juego, solo que en este caso no habían números, solo colores, y normalmente debías colocar el dado, con el color adecuado, en un lugar específico de la pantalla. Al contrario que en Devil Dice, en los Zelda te bastaba con empujarlos para hacerlos girar. Y lo cierto es que, cada vez que juego DD me acuerdo de los Zelda por ese motivo.

    La entrada de hoy es cortita, el juego no requiere más explicaciones de las ya dadas, sólo me queda aconsejar que lo probéis y os dejéis enganchar por él. Hasta la próxima.


    


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