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Este blog es un blog sobre videojuegos, pero no un blog que intente ir de "pro" ni en el que quiera ir de "listillo" sino simplemente un blog en el que hablo sobre los juegos que, por una u otra razón, hayan quedado en mi recuerdo, aquellos que definieron mis gustos en este hobby y aquellos que pudieron haberme marcado. Aquí no hay guías, puntuaciones ni trucos, solo puro amor por los videojuegos y algún que otro recuerdo medio enterrado en la memoria, tampoco hay roms ni enlaces de descarga, para eso ya hay otras página.

domingo, 22 de septiembre de 2024

Camelot Warriors

     



    Algunos no lo entenderéis, pero hoy es un día muy especial. Por fin hablaré de Camelot Warriors, uno de los juegos que menos jugué en la época del Spectrum porque me parecía tremendamente soporífe... ¿Cómo?, ¿que por qué es entonces un día especial?, pues porque este es el último juego del que me tocaba hablar de los seis que traía mi primer Spectrum. ¿Que por qué no lo ha traído antes?, pues por lo mismo que otros juegos de Spectrum... problemas de emulación. El emulador que tenía en la tablet cargaba el juego, pero había un problema con los controles que me impedía controlar al personaje haciendo que me mataran sin poder hacer nada (ya iremos a ello luego), así que, bueno, al fin podré quitarme esta espinita.


Sí, la bombilla esa es uno de los objetos que deberemos encontrar, suerte con ello, por cierto, esta es la primera pantalla, ya he matado al pájaro de mierda que tanto me mataba



    Como digo, Camelot Warriors era uno de los seis juegos de Dinamic que venían de regalo con mi primer ZX Spectrum, para mí, uno de los más flojos, siendo mis favoritos el Game Over y el Army Moves. Camelot Warriors es anterior a los dos juegos nombrados, lo que se nota en la simpleza de los gráficos y, sobre todo, en su jugabilidad, mucho más tosca y lenta. Pero además, también carecía de una característica que amamos los fans de Dinamic en aquellos tiempos... no poseía "doble carga", o en otras palabras, era "un" solo juego. Como ya comenté en su día, muchos juegos de Dinamic eran, en realidad, una especie de "dos por uno" aprovechando la doble cara de las cintas de casete para meter un juego en cada cara y, casi siempre, bastante diferentes entre sí aunque siguiendo la misma historia. Pero en este caso solo teníamos un juego, uno solo.



El despliegue grafico era descomunal...

    No se puede negar, en realidad, que tanto la portada original como la pantalla de carga eran bastante molonas para la época, motivo por el cual fue uno de los primeros juegos que probé...y una de las primeras decepciones que me llevé, todo sea dicho, porque aunque en las cajas de los juegos de aquella colección ponían capturas de los juegos de Spectrum (no como en otros casos que te ponían imágenes de sistemas muy superiores), el ver los paupérimos gráficos y ver como se movían me produjeron arcadas mentales... pero no seamos demasiado injustos.

    Camelot Warriors nos proponía una aventura plataformera de aventura y "acción" en el que debíamos descubrir un "misterio", y para lo cual debíamos encontrar ciertos objetos que nos ayudarían en nuestra búsqueda. Nuestro protagonista, un caballero medieval, podía saltar (a la velocidad de una anciana raquítica, por cierto) y atacar con su espada, a parte de poder moverse a izquierda o derecha. Para avanzar, como digo, debíamos encontrar unos extraños objetos procedentes "del futuro" que habían llegado a "nuestro mundo" de alguna manera.



Otra vez no he recortado los bordes... bah, de todas formas así era como veíamos los juegos...


    Es cierto que el juego, una vez sabes lo que tienes que hacer, y aprendes las rutinas de los enemigos, es de esos que te puedes terminar en unos minutos, como sucedía con Nonamed... espera... Nonamed... No Named... ¿?¿?¿?¿?¿?¿?... XD, es coña. A lo que iba. Camelot Warriors es un juego complicado, bastante, si no sabes lo que tienes que hacer, a dónde tienes que ir, y si no tienes paciencia a la hora de saltar, ya que la mayoría de las situaciones están pensadas para dejarte un margen de error bastante corto, por lo que se hace muy importante el ensayo y error (cosa que odio, por cierto), y te puede hacer perder vidas muy rápidamente... de hecho, y explicando así el problema que expuse al principio, nada más empezar, ¡ya puedes perder una vida!, apareces en la entrada a una cueva, a tu espalda hay un árbol, por lo que no puedes retroceder, frente a ti hay un bicho verde caminando, un poco más a la derecha una avispa enorme revoloteando, pero el verdadero peligro es un pájaro que vuela hacia ti... casi como si esto fuera Dragon's Lair, cualquier mala decisión te quitará una vida. Lo más fácil es matar primero que nada al pájaro, pero deberás atacar cuando esté a una distancia apropiada. Y luego, deberás saltar calculando la trayectoria para evitar a la avispa, el bicho verde, en realidad, es inofensivo a menos que camines directamente hacia él. Pues el problema del que hablé al principio era que los controles se quedaban pillados, y el pajarito me mataba continuamente... Por cierto, la primera vez que jugué, me costó horrores salir de ahí, ¡y era la primera pantalla!, cierto es que me hacía un lío con los controles, y que no tenía la paciencia que tengo a día de hoy. Lo que no se puede negar, es que el juego desde el principio te dice lo que hay.


¡Qué útil es una espada que solo nos permite matar a los enemigos voladores pero no a los que caminan hacia nosotros porque son muy pequeños y no tenemos la capacidad de hacer un ataque descendente o de atacar agachados!... en fin, dijo el delfín


    Situaciones como la que comento arriba las encontraremos a montones, situaciones en las que dar un paso de más o saltar un frame antes (o después) de tiempo nos hará perder una vida, también hay momentos en los que nuestros reflejos serán decisivos, lo cual, en un juego en el que el personaje se mueve como un tetrapléjico en coma no es que sea la mejor decisión que digamos.

    Pero no todo va a ser malo, la verdad, nuestro personaje llegará a tener que tomar la forma incluso de algún animal para aprovechar sus habilidades para poder seguir avanzando, y el desarrollo en si, sin ser la repanocha, era original al mezclar objetos del presente con una ambientación del pasado, teniendo además un final, sino original, bastante "impactante".

    Lo que si se lleva la peor parte es el apartado técnico en general, siendo bastante pobre graficamente y con muy poco sonido, y malo, además, parece increíble que esta compañía sea la misma que luego nos traería joyazas como Capitán Trueno o After the War, dos juegazos del Spectrum como la copa de un pino... aunque claro, uno no nace ya sabiendo, como se suele decir.


Bueno... ahí está la bombillita...


 Camelot Warriors es, en definitiva, uno de mis juegos "menos favoritos" del pack de seis que traía mi primer ordenador, no puedo decir que sea malo ya que hay que juzgarlo dentro del contexto de su época, donde los juegos "eran así" (más o menos). Como era habitual en la época, salió para los demás ordenadores de ocho bits de la época, llegando así a casa de casi todos los niños españoles, que "disfrutaron" de una aventura un tanto extraña con un final inesperado... final que no recuerdo haber visto con mis propios ojos en la época, aunque sí recuerdo convertirme en rana, lo que sí recuerdo es a los niños de mi clase hablando del juego y diciendo que, en realidad, ¡todo era un sueño!, una de las razones por las cuales dejé de jugarlo... sí, era una época en la que los "espoilers" me importaban.

    El juego, como digo, tiene muchos problemas, el control es tosco, el personaje es lento, la espada solo sirve para unos pocos enemigos, los bichos nos matan con un solo toque... eso sí, al contrario que en otros juegos, no deberemos comenzar desde el principio, algo es algo, comenzaremos en la pantalla en la que nos mataron. El salto, además de complicado de controlar, es muy lento, de ahí la dificultad a la hora de calcular el momento idoneo en algunas situaciones, cosa imperdonable en un juego de estas características... pero pese a todo lo dicho, Camelot Warriors pertenece a la historia del software español, siendo un juego perteneciente a la llamada "edad de oro" del software español, una época en la que los juegos patrios no solo podían competir con los de compañías extranejeras, sino que en muchos casos eran incluso superiores, quizás por eso precisamente este juego no destaca especialmente, ya que se queda bastante cortito en todo comparado con juegos de la propia Dinamic, como los ya mencionados Game Over y Army Moves, incluso Nonamed me parecía más entretenido al tener un protagonista más "ágil" y más capaz a la hora de defenderse o moverse por el escenario. ¿Lo recomiendo?... pues no sabría decir, la verdad, si os gustan los juegos toscos pero simples en su concepto pues ok, pero no esperéis acción a raudales ni una exploración similares a las de otros juegos de Dinamic, este juego es otra cosa, es casi una "aventura gráfica" más que un plataformero en si, ya que su acción es bastante lenta... de hecho, hay una zona en la que debes ir hacia la derecha, y salen unos enemigos desde la izquierda de la pantalla, enemigos enanos que NO PUEDES MATAR y que debes esquivar saltando ya que caminan más rápido que nosotros, porque no, no podemos correr. Creo recordar que se podían esquivar saltando hacia la derecha, pero debías calcularlo muy bien, por lo que era más sencillo darse la vuelta y saltarlos mientras corrían hacia ti... el juego, te hacía retroceder... intencionadamente... Pues eso, si queréis probadlo, a lo mejor le pilláis el gusto más que yo, ¿quién sabe?, para mí, lo más satisfactorio de todo, es poder dar por terminadas las entradas sobre mis primeros seis juegos de Spectrum, cosa que quería haber hecho hace muuucho tiempo. Pues nada, no me alargo más, ¡hasta la próxima! 



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