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Este blog es un blog sobre videojuegos, pero no un blog que intente ir de "pro" ni en el que quiera ir de "listillo" sino simplemente un blog en el que hablo sobre los juegos que, por una u otra razón, hayan quedado en mi recuerdo, aquellos que definieron mis gustos en este hobby y aquellos que pudieron haberme marcado. Aquí no hay guías, puntuaciones ni trucos, solo puro amor por los videojuegos y algún que otro recuerdo medio enterrado en la memoria, tampoco hay roms ni enlaces de descarga, para eso ya hay otras página.

viernes, 10 de enero de 2025

Especial Entrada Número 200: Final Fantasy X

     



    Para celebrar algo que solo me importará a mí, alcanzar las 200 entradas publicadas, he decidido hablar de un juego de PS2, y será una entrada "especial" por varios motivos, porque no pondré imágenes de PSP (como ha sido hasta ahora exceptuando el RE4), sino de PS2, será especial, porque es uno de mis juegos favoritos de todos los tiempos, del que pensé que no hablaría nunca porque se salía del rango que yo mismo me había autoimpuesto, y será especial porque, creo yo, será una entrada bastante larga. Quizás, sólo quizás, se me escape algún spoiler, pediría perdón, pero es que me da igual, si no has jugado a este juego a estas alturas, te mereces que te hagan spoilers hasta de tu serie favorita. Como dato adicional, tras esta entrada, iré publicando varios "especiales" más que se alejarán un poco de la tónica habitual, como serían "tops" de mis juegos favoritos de consolas, puede que de Spectrum y, quizás, un top definitivo de MIS juegos favoritos, eso ya lo veremos, y sin más que añadir, comencemos. 


Pues aquí, a hostias con un bicho cualquiera

  

    Esta entrada, que podría parecer solo "una más", es en realidad una muy importante para mí personalmente. Ya hemos tenido aquí casi todos los Final Fantasy "clásicos", desde los de PS1, hasta los de SNes e incluso alguno de Nes, pues hoy toca Final Fantasy X. El primer FF que salió en PS2 y, para mí, el último GRAN Final Fantasy. Y es curioso, porque la primera vez que lo vi, tal y como me pasó con el VII, me dejó un poco frío, pero creo que eso se debe a que, en aquella época, aún no tenía PS2, y ese rechazo fue casi un sistema de "defensa". Pero tampoco voy a mentir, me habían llegado "rumores" (no estaba muy informado en aquella época) de que el "romance" estaba mucho más presente que, por ejemplo, en FFVIII, que tenía una gran presencia, siendo prácticamente el eje central de todo. Como fuera, un día fui con mi hermano a casa de un amigo suyo y nos mostró algunas escenas y lugares importantes, y claro, obviamente no entendí nada, no tenía contexto alguno así que todo me pareció bastante meh. Pero claro, pasó el tiempo y me hice con una PS2 Slim, y siendo fanático de la saga, pues me pillé FFX, que de hecho, creo que me compré también el FFX2 casi al mismo tiempo (sí, ya habrá tiempo para ello). y, con la mosca detrás de la oreja, metí el disco en mi PS2.


Y así comienza una de las mejores intros de la saga... de la generación, y de la historia de los videojuegos



    Yo ya conocía el tema de Zanarkand, mi hermano era aficionado a la "música" electrónica y, entre su mierd... quiero decir, entre sus discos de música, perdón, "música", tenía uno en el que le habían grabado un "remix" de ese tema en no sé qué género de "música" electrónica... y no voy a mentir, molaba aún con toda esa mierda... pero escuchar la intro original del juego, con las notas lastimeras de un piano, mientras veías al grupo de protagonistas sentados viendo el atardecer, para luego escuchar a Tidus decir "listen to my story"... se me pusieron los pelos de pollo (vellos de punta, que dicen en otros sitios). El juego en sí comenzaba de una manera que me descolocó bastante. Resulta que, Tidus, era el jugador estrella de un deporte llamado "blitzboll" (así lo llaman en el juego, no lo he escrito mal), y la historia nos coloca justo antes de un partido importante. Vemos a Tidus hablar con fans en la calle para luego llegar al estadio y, entonces... ¡la mejor puta intro de la historia!, con una calidad que ya querrían muchas intros modernas, se nos presentaba a un monstruo enorme que atacaba la ciudad, no sin antes mostrarnos escenas espectaculares de ese tal "blizboll" un deporte similar al balonmano pero que se jugaba en una esfera de agua flotante y que... sí, yo puse la misma cara, pues eso, que era un deporte que incluso permitía cierto tipo de contacto físico. Tras la brutal intro, ya se nos daba el control de personaje, ahí conoceríamos a Auron el Puto Jefe, otro de los personajes jugables, que nos llevará por un pequeño tramo que ejerce de "tutorial", luego sucede "algo" y ambos quedan separados... tampoco quiero destripar toda la historia, al ser un juego de rol japonés, esta tiene mucha importancia, y mola, lo cierto es que mola. De hecho, una de las cosas que más me gusta de este juego, es que la historia no se anda tanto por las ramas como en otros Final Fantasy, tiene sus giros y "sorpresas", obviamente, pero es una historia mucho más sencilla de seguir que, por ejemplo, las de FFVII y VIII, y sí, estaba muy centrada en el romance, pero claro, ¿Quién no se enamoraría de Yuna?...


-Pues se ha quedao' bien el día. -Ya te digo.

    


    Joder, cómo voy a gozar esta entrada. Antes de ir al juego en si, quiero contar algo, ya que al final, este blog trata de mis experiencias con los videojuegos y lo que significaron en mi vida, más que un blog de "reviews". Algo que debo decir antes de ir de verdad a la chicha, es que éste fue el último Final Fantasy desarrollado por la antigua Squaresoft, y en el que trabajó el maestro Nobuo Uematsu a cargo de la banda sonora. Para algunos, parecerán cambios "menores", pero para un fan de la saga, eso supuso la muerte del "espíritu" Final Fantasy. No digo que los juegos que salieran después fueran malos (aunque alguno de ellos me dejan con la duda... ), sólo que ya no eran lo mismo. El propio Final Fantasy XII, del que espero hablar en breve, sin ser un mal juego, ya me parecía demasiado distinto a lo que me esperaba, de hecho, no llegué ni a terminarlo (ya lo hablaré en su momento), y creo que quizás le habría ido bien, si hubiera sido una IP nueva, porque no es como si Squaresoft (ya Square-Enix por entonces) no tuviera más IP roleras a parte de Final Fantasy t Dragon Quest. Pues eso, que a mí, personalmente, fue el último gran Final Fantasy, siendo PS3 la única consola de la que no llegué a jugar NINGÚN FF propio... ah, cierto... LAS VERSIONES HD de FFX y FFX-2, con eso está todo dicho, sigamos.


    La música, estaba corrigiendo y ampliando detalles cuando me di cuenta de que no le di a la música la importancia que merece. Como todo buen FF, la banda sonora es sublime. Ya comenté el tema de To Zanarkand, pero es que el juego posee una enorme cantidad de temas musicales sublimes, encima, tiene el que, para mí, es el mejor tema de batalla normal de toda la saga, superando al de FFVII, el cuál había sido mi favorito hasta entonces. El tema de lucha contra "el spoiler más grande de la historia" (uno de los jefes finales), es mítico, un tema que con un estilo peculiar (para la saga) y que mucha gente llegó a creer que era interpretado por la banda alemana Ramnstein, lo cuál hubiera sido una locura de ser verdad, pero es sólo una leyenda, por cierto, el que cantaba dicho tema, seguro que tuvo que comer luego muchos caramelitos de menta para la garganta. Otro tema a destacar, es Suteki Da Ne, un tema cantado, el cuál hace que, FFX sea el primer FF en tener más de un tema musical con voces. Este es un tema musical que evoca muchas emociones, de hecho, se podría considerar el tema "de amor" del juego, ya que es el que suena cuando Tidus y Yuna tienen el "beso submarino"... no, no es una metáfora pornográfica, dotando a la escena de una atmósfera mágica pero melancólica a la vez... joder, si es que no puedo dar contexto sin hacer diez mil spoilers Por lo demás, todos los temas musicales eran muy buenos, la música ambientaba cada situación a las mil maravillas, el drama, la tensión... daba igual el momento, la música siempre acompañaba perfectamente cada escena, Nobuo Uematsu siempre se ganaba, sobradamente, el sueldo en todos los juegos que participaba.


Todos somos Tidus... sí, Tidus es el que está usando los prismáticos

    


    La PS2 me llegó en una época (psicológicamente hablando), muy mala, yo soy de personalidad bastante depresiva (¿para qué ocultarlo?), por lo que los videojuegos, en muchas ocasiones, eran mi refugio cuando no podía acudir a nadie ni a nada más (di no a las drogas, yo nunca las he probado y no entiendo a quien lo hace. Mensaje gratuito XD). Y este juego me llegó en el momento justo, un momento en el que todo parecía ir cuesta abajo y sin frenos, cosa que, por otro lado, me pasa (pasaba) mucho. Por ello, todos  aquellos personajes, desde el estúpido Waka, pasando por la tetona Lulu, o la ingenua Rikku, pasando por el bestial pero fiel Kimahri y los ya mencionados, se convirtieron en mi mejor compañía. Os va a parecer una locura, pero este juego, me lo he llegado a comprar TRES VECES, la primera en PS2, luego en su versión HD para PS3, ya no tenía PS2 (ni el juego), así que tampoco es una locura, pero luego, vendí el disco (mi consola comenzó a no leer juegos, y este era uno de ellos), pero me lo pillé luego en versión digital... vamos, que si lo pirateo, creo que no puede quejarse nadie, pero esto lo digo para que entendáis lo importante que es este juego para mí. Jamás he hecho lo mismo con otro juego, a lo sumo, hice algo similar con Metal Gear Solid 3, pero en ese caso, sólo me compré la versión de PS2 y, luego, de nuevo, una versión hd que venía junto con MGS2 y Peace Walker, pero además, fue durante el 20 aniversario (creo que era el 20) de PlayStation, en el que sacaron unas ofertas brutales en la store. Decir que amo este juego y sus personajes, es quedarse corto. Y bueno, ahora sí, vayamos a lo que importa.


Y esto es lo que pasa si Yuna no desaYUNA, ¡tachááááááán!... "humor"

    


    Volviendo a la historia... y sin querer hacer muchos spoilers, Tidus es "transportado" a un extraño mundo que, en ciertas cosas, se parece mucho al suyo, incluso hay blitzboll, que ya es raro. Dicho mundo está amenazado por un gigantesco monstruo llamado sinh. Para combatir a dicho monstruo están los invocadores, hombres y mujeres que dedican su vida a un peregrinaje en busca del eón supremo (eón es como aquí se llama a los monstruos invocados). El problema, es que sinh es un monstruo demasiado poderoso, y lo normal es que, el invocador y sus guardianes, guerreros que acompañan al invocador en su búsqueda, acaben muriendo. Es más, aunque consiguieran derrotar a sinh, esta es siempre una victoria temporal, ya que el monstruo, SIEMPRE regresa. De hecho, el padre de Yuna, consiguió derrotar al monstruo, y aún así, su hija, tiene que enfrentarse de nuevo al monstruo. Tidus, en su accidentado viaje, acabará conociendo a Yuna y, al enterarse de que su destino final es Zanarkand, que curiosamente, es como se llamaba su ciudad, decide acompañarle. En su aventura conocerá al resto de personajes, Rikku, una simpática albhed, una raza humana que se caracteriza por usar maquinaria "prohibida"... y sí, por tener unos ojos un tanto peculiares. Rikku es también guardiana de Yuna, además de su prima, y aunque pudiera parecer que no es muy útil, en realidad sí lo es... actúa como desahogo cómico en ocasiones, ejem. Nah, en serio, la verdad es que es un buen personaje, ya que ayuda a Yuna a relajarse en ocasiones. También tenemos a Auron, que volverá a aparecer en la historia y que se unirá al grupo "ofreciéndose" como guardian. Dato curioso, Auron fue guardián del padre de Yuna, lo que le convierte en toda una celebridad. Kimhari es un ronso, un ser con aspecto animal, muy fiero pero noble, y que conoce a Yuna desde que era una niña, tiene el cuerno roto, por lo que es la burla para los de su especie. Lulu y Waka son de la misma aldea que Yuna, la conocen desde niña, y aunque discuten mucho entre ellos, en realidad... bueno, digamos que, en FFX2, ambos tendrán un hijo. Yuna... no he hablado de Yuna. Pues Yuna es la protagonista femenina principal del juego. Es invocadora, por lo que toda la trama gira sobre ella. Es hermosa, lista, valiente, un tanto severa por el destino que le aguarda, y aunque, obviamente, tiene miedo de lo que puede venir, su sentido del deber es más fuerte. Obviamente, Tidus se enamora de ella irremediablemente. Me gusta mucho la manera en la que presentan a Yuna. FFX es un juego japonés (¡qué sorpresa!), me explico. Este fue el primer FF que tuvo captura de movimientos y voces actuadas. Pues en las diferentes escenas, las animaciones de Yuna eran muy recatadas, muy de persona "venerable" a pesar de su juventud, siempre hablaba de manera suave, sin dejarse llevar por los sentimientos... sí, todo muy japonés, pero japonés "tradicional"... pero en realidad tiene su justificación. Los invocadores no eran solo guerreros, eran un símbolo de esperanza para el pueblo, por lo que no podían mostrar públicamente sus sentimientos, no podían mostrarse dubitativos, ni asustados, debían parecer firmes y convincentes, por eso, Yuna, tenía a veces comportamientos casi de anciano ("stayyy awayyy from the summoneeeer!"... nah, no lo entenderíais). Fuera como fuera, Yuna tenía en realidad un carácter dulce, y un lado ingenuo y juvenil que pocas veces sacaba (por las razones mencionadas), tan solo Rikku, y más tarde Tidus, conseguían sacar ese lado de ella... Y bueno, Tidus... Pues por una puta vez (bueno, en FFIX también XD), tenemos un protagonista alegre y risueño... sí, ok, pasa por un mal momento cuando comienza todo, pero es el típico tío al que nada le parece lo suficientemente malo como para no seguir adelante, siempre encuentra un motivo para reír, siempre sabe cómo levantar los ánimos de... ¡putos traumas paterno filiales!. Obviamente, no todo iba a ser tan bonito, pero bueno, resulta que, ¡ojito!, el padre de Tidus, ¡también fue guardián del padre de Yuna!, ¿pero cómo puede ser eso si vivían en mundos diferentes? Ok, esto parece que son "spoilers" (y si lo parecen, es porque lo son, así que, ¡alerta de spoilers!... perdón), nada, nada, son cositas que descubres bastante pronto en realidad, ya que si hay otra cosa sobre la que gire la historia, es sobre la relación tan negativa que tuvo Tidus con su padre, pero bueno, si queréis saber cómo terminó dicha historia, os invito a que juguéis el juego.


Ya está el patriarcado liandola de nuevo...

    


    No quiero contar toda la historia, obviamente, cada personaje tiene su propio arco argumental, unos mejores o más profundos que otros, como siempre, Waka es un puto racista albhedofóbico... ¿está bien dicho?, que dejará de serlo tras entablar amistad con Rikku y conocer a su pueblo (es un espoiler sí, pero pequeñito), Kimhari volverá a su tribu a buscar "lo que es suyo", cada cual que entienda lo que quiera... y así con todos, claro. Pero digamos que, tras mucho viajar, el grupo descubrirá que, las cosas, no son como les contaron, sí, Yuna reunirá diversos eones y se deberá enfrentar a sinh en un combate final que... que mejor no digo nada. La historia, como digo, es relativamente sencilla si la comparamos con otros juegos de la saga, y quizás por ello es de las que más me gusta. Además, el romance, es más "orgánico" que en otras historias. Es cierto que Tidus se "emboba" la primera vez que ve a Yuna, pero es poco a poco, cuando se van conociendo, que ambos comienzan a ver que sienten algo el uno por el otro, no se enamoran "porque son los protagonistas" como escuché en un vídeo no me acuerdo dónde (aunque bueno, sí, pero no... ), se enamoran porque se dan las circunstancias. Y es un amor muy "japonés", muy "platónico", de hecho, tan sólo hay un beso en todo el juego... ¡pero qué puto beso!, podéis buscar la escena en YouTube, es de las cosas más emocionantes que he podido vivir en un videojuego, y obviamente, sin el contexto, sin saber lo que sucede, sin haber pasado decenas de horas con los personajes, el impacto no es el mismo, pero igualmente es una escena muy hermosa... y bueno... ¿por qué no dejamos ya la historia y los personajes y hablamos de mecánicas y demás?


El primer personaje importante que nos encontramos al llegar a Spira, es Rikku... spoiler, ESA, es Rikku... ¿qué, Auron?, mejor no digo nada, que eso sí que sería un spoiler de los gordos

    


    Pues venga... aunque podría estar todo el día hablando sólo de Yuna y su "i'm a summoner, like my father before me" (sí, una puta referencia a Star Wars), comencemos a hablar de cosas bastante interesantes como son las mecánicas jugables.

    FFX por primera vez, dejaba utilizar A TODOS los personajes en un combate... no a la vez, obviamente, ya que en pantalla sólo podíamos tener a tres, pero podíamos cambiar un personaje por cualquier otro en cualquier momento dentro del turno del personaje en cuestión. Y esto es muy importante, ya que como suele ser lo normal, solo ganaban experiencia los que actuaban, ojito con eso de "actuar", en combate. Y me explico. Aquí no es como en Pokémon, que podías tener un Pokémon débil el primero, para luego cambiarlo al comienzo de un combate, no aquí no funciona así la cosa. Para que un personaje ganara experiencia, debía hacer algo, lo que sea, utilizar un objeto, atacar o usar alguna habilidad disponible, tras ello, sí podías cambiarlo por otro personaje. Pero antes, expliquemos como va el rollo de los turnos. ¿Os acordáis de cuando hablé del Grandia... seguramente no XD, pero el sistema era similar. A la derecha de la pantalla veríamos un listado de los diferentes personajes presentes en el combate mostrando el orden de actuación, aquí los sprites de los personajes no se movían, los turnos eran más como los primeros FF en los que podías tardar media hora en decidir qué hacer, el orden sólo cambiaría si, por ejemplo, cambiabas a un personaje lento por uno rápido, o utilizabas prisa sobre el grupo (o lo hacía el grupo enemigo) con lo que los personajes implicados ganarían más turnos. Pues como digo, una vez llegado el turno de un personaje, podías decidir hacer algo con él, o cambiarlo por otro, el nuevo personaje, podía actuar de inmediato, no debía esperar un nuevo turno, lo cuál era perfecto para ir cambiando de personajes en combates donde se podía ganar mucha experiencia. Parece lioso, pero en realidad no lo es. No necesitas, por ejemplo, tener siempre un sanador en el grupo, te basta con sacarlo en el momento adecuado y curar a tu personaje herido, y si quieres robar algo, puedes robar, y luego cambiar al personaje ladrón (Rikku, en un principio) por otro más fuerte. Otra cosa muy importante a tener en cuenta en los combates, era que la experiencia adquirida por cada personaje dependía de su rendimiento y efectividad en combate, no se premiaba igual el usar una poción que, por ejemplo matar a varios enemigos o hacer un crítico, por ello, los personajes "fuertes" tendían a avanzar más rápido que el resto, por lo que no es mala idea enseñar técnicas de combate a dichos personajes lo más pronto posible. Además, para ganar experiencia, no bastaba con "estar" en el combate, el personaje en cuestión debía realizar al menos una acción, la que sea, ya fuera atacar, utilizar un objeto o cualquier habilidad disponible, por lo que no servía usar el primer turno del combate para ir sacando a todos los personajes sin hacer nada, cosa que podíamos hacer porque, hacer eso, no hacía pasar un turno como tal, eso no pasaba hasta que realizáramos alguna acción de combate.


El primer eón de Yuna

    


    Una de las cosas más innovadoras de este juego, es que no había niveles de personaje. Y preguntaréis, ¿y si no hay niveles, para qué daban experiencia?, y yo diré, si no sabéis eso, es porque no habéis jugado nunca... quiero decir, al ir ganando experiencia vas ganando "pasos" (¿guat?, dirán los que no saben inglés). Mejor vayamos "paso a paso", ¡qué bien hilado, madre mía!. Bueno, el desarrollo de los personajes se basa en un tablero de esferas, tablero que es común para todos, lo cuál no es un detalle baladí. Dicho tablero está formado por una red muy enrevesada, con muchas bifurcaciones, idas, venidas, y zonas bloqueadas, por las que el personaje puede "moverse" (no el personaje en si, sino nosotros con un cursor XD). Pues en el tablero hay "nodos" en los que podemos meter esferas de diferente tipo, físicas, mágicas o lo que sea, para ir activando habilidades y capacidades nuevas. Será así como aumentemos la fuerza, la vida o los pm o incluso aprendamos nuevas habilidades. Pero claro, he dicho que hay que colocar esferas, y las esferas no son gratis, hay que conseguirlas, ¿y cómo se consiguen?, pues luchando. Tras cada combate, se nos podrán dar desde una a varias esferas, de uno, o varios tipos... y es cierto que, al principio, resultan escasas, pero luego nos sobran, sobre todo porque podremos utilizar habilidades para que los enemigos nos den más esferas. El tablero de esferas es enorme, y como digo, tiene zonas bloqueadas, para desbloquearlas, necesitaremos esferas llave, las cuales hay de diferentes niveles, a más poderosa sea la habilidad (o habilidades) que desbloqueemos, de mayor nivel será la llave necesaria. Ni me voy a poner a explicar cómo se pueden farmear las llaves, hay muchas buenas guías en internet. El hecho es que, con el tiempo, podemos desbloquear todo el tablero, teniendo todos los personajes la capacidad de aprenderlo todo. Que por cierto, si consigues hacer eso con todos los personajes... pffff, el jefe final, o mejor dicho, el "pre" jefe final, te durará dos turnos, y porque tiene dos fases (si tienes expansión de daño, que se me olvidaba). Otra cosa que tiene interesante el tablero, es que tiene muchos nodos vacíos, en dichos nodos, podremos meter esferas que los convertirán en nodos útiles que nos ayudarán a tener más vida aún o lo que sea, esas son esferas aún más complicadas de encontrar, pero tampoco pasa nada, con las que hay, tenemos de sobra. He dicho, creo, que el tablero de esferas es compartido por todos los personajes, y menos mal, porque al abrir un paso bloqueado con un personaje, los demás podrán pasar por él, no será necesario abrir cada zona bloqueada para cada personaje. Y algo muy importante a mencionar es que, a causa del peculiar diseño del tablero, llegaremos muchísimas veces a callejones sin salida, teniendo que regresar sobre nuestros pasos para poder seguir continuando... y lo de los "pasos" no es gratuito. Avanzar una sola casilla cuesta UN paso, tenga o no un hueco útil (vamos, uno que podamos activar con alguna esfera), pero luego, a la hora de retroceder, es diferente, ya que pasar a través de casillas activadas es más barato (menos mal), además, hay esferas que permiten teletransportar a UN personaje a un punto específico, ya sea una esfera que tengamos activada con dicho personaje o incluso a donde esté OTRO personaje. Como os podéis imaginar, avanzar por el tablero no es sencillo, o bueno, sí es sencillo avanzar, lo que no es tan fácil es elegir el camino, ya que se nos abren muchísimas posibilidades, y si no queremos dar mil vueltas, hay que pensarse mucho las cosas en ocasiones, y lo peor es que, llegado el caso, tendremos que gastar muchos "pasos" tan sólo para retroceder a un lugar del tablero que nos permita seguir mejorando a nuestro/s personaje/s, pero en realidad, es un auténtico vicio, ya que nos permite mejorar nuestros personajes como queramos. Eso sí, al principio de la partida, se nos permite escoger entre dos modos, el "simplificado" y el "avanzado", el "simplificado" está mucho más "guiado", impidiendo que podamos ir como nos de la gana facilitando bastante nuestras decisiones, está bien si no te quieres complicar la vida, pero yo, por mi parte, sólo lo probé en mi primera partida... y al rato comencé otra con el modo avanzado... es lo que hay.


Sinh es tan enorme, que en nuestro primer enfrentamiento, tan solo veremos una aleta suya...

    


    Otra cosa bastante interesante, y muy bien llevada, son los "turbos". Los "turbos" son lo que, en Final Fantasy VII se llamaron "límites" y que, en diferentes entregas tuvieron diferentes nombres, y que no eran más que ataques especiales, muy poderosos, que eran específicos de cada personaje y que, normalmente, sólo se podían realizar al rellenar la barrita correspondiente (excepto en el VIII, que dependía más de los puntos de vida del personaje. En FFX regresamos a la barrita que hay que rellenar, la cuál lo hará cuando recibamos dañ... ah, cierto, eso era al principio de la partida, ya que, con el tiempo, cada personaje aprendería diferentes maneras de rellenar la barra, ya sea matando enemigos o lo que sea. Dependiendo de cada personaje, podíamos escoger la manera más práctica. Los turbo, como digo, eran específicos para cada personaje, y cada uno requería alguna acción diferente, dependiendo de nuestra pericia a los mandos la efectividad del ataque. Para no tener que explicarlo otra vez... los eones también tenían sus propios turbos, los cuáles se rellenaban al ser atacados ELLOS (no Yuna)... ¿Y cuál era entonces el turbo de Yuna?... pues simple, otorgaba a Yuna el poder de invocar al eón que ella quisiera con la barra de turbo de dicho eón al máximo, que parecerá una tontería, pero es más fácil rellenar el turbo de Yuna que el de los eones, ya que deberías luchar con ellos, lo cuál puede resultar muuuy tedioso, aunque de todas formas, si te ves "obligado" a invocar un eón, lo cuál sólo sucedería en combates de jefes complicados, no te preocupes, la barrita de tu bicho subirá con rapidez... ahí lo dejo. Lo mejor de los turbos, es que, encima, te los puedes guardar, no desaparecen al terminar un combate como pasaba con los trances de FFIX, no, si la barra de turbo de un personaje en particular se llenaba justo al terminar el combate (cosa que puede pasar en realidad), no pasa nada, se guarda y, además, no sustituye al comando "atacar", como si pasaba en FFVII, por lo que puedes rellenar los turbos de todos los personajes para usarlos contra un jefe. Y ojo, esa es una estrategia para nada despreciable... cuando conoces el juego y sabes cuando y donde aparecen los jefes, claro.


Volvemos a tener monstruos con diseños... "curiosos" en FFX

    


    Hablemos de las armas, que también tienen lo suyo. Al contrario de lo que pasaba en otros juegos de la saga, aquí no es raro tener decenas y decenas de armas para cada personaje, ya que en casi cualquier combate nos darán alguna, pero eso da igual. Lo importante, es que las armas tienen ranuras, desde ninguna (equisde) a cuatro. Dichas ranuras sirven para "forjar" habilidades, las cuales van desde daño elemental (o de estado) a mejorar las capacidades de nuestros personajes, o incluso ponerles habilidades, como "sembrar semilla", lo cual nos sirve, ¡tachán, tachán!, para ganar más esferas de un determinado tipo (obviamente, hay un "sembrar semilla" para cada tipo de esfera "normal"). Entre las diferentes habilidades que podemos equipar, están "daño expandido", que nos permitirá hacer daños superiores a 9999, pudiendo hacer un máximo de 99999, lo cuál es una burrada teniendo en cuenta la "poca" vida que tienen los jefes normales en este juego. Para poder forjar un arma, obviamente deberemos tener un arma con ranuras libres, y los materiales necesarios, como siempre, a más potente sea una habilidad, más complicados de conseguir serán los materiales. Pero además, deberemos "conocer" esa habilidad, lo cuál suele suceder cuando encontramos un arma con una habilidad que no conocemos. Las armas y escudos, tienen diferentes "skins" y nombres dependiendo de sus capacidades, y lo curioso, es que si a un arma le añades determinadas capacidades, cambiará tanto el nombre como su skin, lo cuál es... raro, pero mola mucho. Lo de las armas es bastante curioso, no es como en otros juegos que, directamente, aumentan tu ataque y el daño que hagas, aquí, las armas, no tienen "características" o "estadísticas" de ese tipo, lo que importa de verdad son las habilidades que tengan, éso es lo que las convierte en mejores, y lo mismo sucede con los escudos, que nos pueden dar inmunidad o incluso absorción de determinados elementos, eso sí, a costa de gastar materiales, porque una cosa hay que dejar clara, aunque sólo necesitamos un tipo de objeto para forjar una habilidad, en ocasiones, el número necesario, es enorme, y si es un objeto que podemos comprar no pasa nada (si tenemos dinero suficiente, claro), pero si es un objeto que debemos farmear... pues ya sabéis lo que toca.


Parece un sistema engorroso, pero da mucha libertad al jugador

    


    Como buen Final Fantasy que es, FFX no sólo nos proporciona unas buenas horas de historia, también tenemos muchos minijuegos y búsquedas secundarias. Desde el mencionado blitzbol, que podremos jugar en cualquier momento desde una esfera de guardado cualquiera, hasta la búsqueda de los diccionarios albhed o la sala de "entrenamiento"..., que es un sitio muy interesante ya que, aquí, puedes farmear llaves esferas... ¿y qué es la sala de entrenamiento?, pues dicha "sala" es una zona situada en la Llanura de la Calma en la que podrás luchar con diferentes monstruos muy poderosos. Para poder desbloquear dichos monstruos, deberás "capturar" a TODOS los monstruos de diferentes zonas, entonces, el responsable "creará" un nuevo y poderoso monstruo con el que podrás luchar. Mucho son "simplemente" versiones más (mucho más) poderosas de monstruos normales o jefes, pero también hay enemigos "exclusivos". Para "capturar" enemigos te basta derrotarlos con un arma que tenga equipada la habilidad "capturar", habilidad que, como ya expliqué, podrás equipar a cualquier arma que ya tengas... En esta zona, como digo, podemos farmear cositas muy ricas, y debo decir que sólo le saqué verdadero partido en PS3, dónde le di mucha más caña a FFX que en PS2, ya que no tenía ningún tipo de guía en aquellos tiempos, y no sabía lo útil que era... y me daba pereza pegarme con bichos fuertes sin saber qué recompensas podía obtener, claro.


Tidus haciendo turismo

    


    Pero hablemos también, aunque sea un poquito, del apartado técnico, que me estoy alargando mucho (y lo que me queda). Pues y aunque lo jugué conociendo ya las capacidades de la PS2, lo cierto es que todo me pareció maravilloso. Los gráficos eran de lo mejor de PS2 (aunque FFXII, creo yo, le superó), tenía escenarios muy hermosos, detallados y coloridos con multitud de npcs rondando. El juego era totalmente en 3d (mentira, aún seguían habiendo algunas que otras zonas en 2d, pero el mundo en si, era 3d), pero no podíamos mover la cámara a nuestro antojo. El diseño de algunos enemigos me parecía brutal, aunque había personajes que... madre mía.. ¿Quién era el peluquero de Skinner?, perdón, quería decir Seymour, no podía dejar de hacer un chiste sobre como, cierto personaje, compartía nombre con el director del colegio de Bart Simpson. Por cierto, me supuso un bajonazo tremendo, un personaje que, se supone, debe causar respeto (o incluso miedo), y su nombre te recuerda a... bueno, ya lo he dicho, ¿no? Pues eso, que su peluquero se lució. Hablando de diseños. Todos los personajes principales son de diez o casi, el vestido de Lulu, que tiene un rollito casi "gótico", con sus correajes y demás es sencillamente perfecto, un vestido genial para hacer cosplay... si eres chica pechugona, claro, además, se remata con un peinado y maquillaje geniales (yo hablando de peinados y maquillaje... lo que faltaba). Quizás, los menos llamativos son Waka y Rikku, pero aún así, son personajes con bastante carisma. Ni siquiera mo voy a molestar en hablar de Puto Amo Auron, con un diseño de vestuario que parece sacado de un anime de samuráis, y una actitud que parece sacada de... ejem... un anime de samuráis, me parece un diseño espectacular, con ropas cuyo cuello alto apenas dejan ver su cara, y unas gafas que ocultan una cicatriz... y no digamos ya las "espaditas" que se gasta el tío. ¿Y qué decir de Tidus y Yuna?, a poco que sepas de diseño y del lenguaje del color, te darás cuenta de que, en realidad, sus ropajes son muy similares, en colores y en composición, cosa que está hecha a propósito (ya sabéis como es esto, son partes complementarias, la parte femenina/masculina del héroe y tal... cosas profundas que no me voy a poner a explicar aquí ahora, pero que los artistas reflejan, por ejemplo, en el diseño de vestuario). Yuna, lleva un vestido que, en cierta manera, puede recordar a ropajes típicos japoneses, obviamente no es casualidad, se le quiere dotar de cierto aura casi de "misticismo", y a la vez de "seriedad" o "sobriedad", lo cuál encaja con su personalidad. Mientras que Tidus, aun compartiendo colores, sus ropas son más desenfadadas (igual que él). Kimhari por su lado, es un ronso... ya lo he dicho, un ser bestial con aspecto entre oso y felino con un cuerno (roto) en la frente, su diseño mola, pero no es de los que más me llaman la atención.


La mejor frase de la historia del universo

    


    No quiero terminar esta entrada, a pesar de que ya me está quedando muy larga, sin hablar, aunque sea por encima, de los "secretos" de este juego. Para comenzar, hablaré de las zonas secretas, pero para ello, debo explicar antes cómo funciona el "viaje rápido" en este juego. Por como está diseñado el mundo, no hay "mapa abierto" sino zonas individuales conectadas entre ellas, no hay "máquina voladora"... o bueno, sí la hay, solo que su uso no es como en otros juegos. En FFX, la "máquina voladora" nos dejará en un punto de guardado que ya hayamos visitado, y viceversa, desde cualquier punto de guardado, podremos regresar al "barco volador". Sabiendo eso, podríamos deducir que no podemos viajar a ningún lugar (con la máquina voladora, se entiende) que no hayamos vistazo antes... ¡eeeeerrrrroooorrrrrr!. Desde el mapa de viaje del barco, podremos, efectivamente, decidir a qué esfera de guardado podemos ir, pero también podemos introducir directamente unas coordenadas para ir a sitios "especiales". Así, por ejemplo, podemos acceder a uno de los eones más poderosos del juego (ah, no he hablado bien de los eones... puf... esto se va a alargar mucho XD). Lo curioso de las coordenadas, es que no sé si, en el propio juego, se te llegan a proporcionar de alguna manera, porque es una lata ir probando manualmente todas las posibilidades hasta dar con unas coordenadas que funcionen porque, obviamente, la mayoría no te llevarán a ningún sitio. Son varias las localizaciones, no las voy a poner, pero algunas son lugares en las que "simplemente" encontraremos algún cofre, y en otras, accederemos a lugares con enemigos poderosos o, como digo, el lugar en el que "descansa" cierto eón.


Un ejemplo de arma con cuatro espacios, uno de ellos ya viene ocupado, los otros tres, cuando desbloqueemos la habilidad correspondiente, podremos "forjarlos" como queramos

    


    Pues sí... hablemos de los eones.

    Los eones son los monstruos que pueden invocar los, estooo... invocadores, para que les ayuden en su lucha contra Sinh. Estos eones, deben ser "despertados" para que accedan a luchar junto al invocador. Para ello, se debe atravesar un templo, lleno de rompecabezas (en ocasiones bastante pesados). Cada templo tiene una temática inspirada en el elemento principal del eón en particular, si un eón es de "elemento hielo", pues el hielo tendrá fuerte presencia en el templo. El funcionamiento de los puzles suele ser similar. Deberás agarrar una esfera de algún tipo, colocarla en algún sitio para que suceda algo, y así ir abriéndote camino... y esto que suena tan sencillo, se puede complicar de muchas maneras. Además, en cada templo hay tesoros secretos, que aunque son opcionales, DEBES AGARRARLOS TODOS si luego quieres acceder al eón final... sí, ese al que debes acceder con el barco volador (no es un barco, pero las viejas costumbres son difíciles de abandonar). Y bueno, supongamos que ya tienes un eón (de hecho, el primero, es "gratis"), ¿ahora qué?... pues invocar un eón es, en realidad, bastante diferente a lo que era en juegos anteriores. Cuando invocas a un eón, este no se limita a hacer un ataque y marcharse, no, sustituye a los otros dos personajes (Yuna permanece en el combate), y puedes controlarlo como un personaje "normal". Podrá atacar o realizar cualquier ataque o habilidad que le hayamos enseñado... sí, los eones también pueden ser entrenados. Al igual que con las armas, podremos gastar objetos para mejorar habilidades y las características de nuestros eones, pero suele ser incluso más caro. Y ojo, que al final del juego... os podéis arrepentir de mejorar demasiado vuestros eones (no voy a hacer spoilers peeeroooo). Sea como sea, podremos retirar a nuestros eones o, como si de Pokémon se tratara, cambiarlo por otro. También se "retirará" el pok... digo el eón, si este es derrotado, volviendo el resto del grupo al combate. Esto nos permite, por ejemplo, sacar un eón cuando un enemigo poderoso va a realizar un ataque potente, ya sabéis, esos que vienen con "cuenta atrás" (que no hay pocos), sin recibir daño. Yuna no es dañada (por alguna razón), por lo que no debemos preocuparnos por ella en ese sentido.


Tidus no cae bien a Kimahri al principio, y no es que quiera matarlo, solo prefiere que no esté vivo

    


    Los combates... no he hablado de los combates. Estos, como dije más arriba, tenían un sistema de turnos similares a los de Grandia, aunque más simplificado, y podíamos cambiar de personaje en cualquier momento, hasta ahí ok. Pero había combates de jefe en los que había "comandos extra". Dependiendo del jefe en cuestión, podíamos "hablar" (para subir alguna característica de nuestros personajes), mover al grupo hacia una posición ventajosa o incluso golpear un objeto del escenario para facilitar el combate, lo cuál dotaba de variedad y originalidad a los combates con jefes. Otra característica de los personajes era que, en un principio, cada personaje tenía una especialidad, Tidus era muy bueno contra enemigos rápidos, Waka con los voladores, Auron con los acorazados y demás, aunque con el tiempo (y las esferas suficientes) todos acaban siendo más o menos iguales en ese sentido, pero sí es cierto que, durante buena parte de la aventura, será muy habitual el cambiar de personajes para adaptarse en cada combate. Algo que quiero resaltar es la manera tan chula que se aprovechó el que, ahora, los personajes tuvieran voz. En los combates, los personajes pueden llegar a decir cosas, dependiendo de la situación, un personaje puede dar ánimos al resto, hacer algún chascarrillo, o tener una pequeña conversación (un par de frases) con otro personaje, lo que resalta aún más la personalidad de los personajes y hace que parezcan más vivos.


Los escenarios, aunque bastante lineales en su mayoría (no al nivel de FFXIII), eran muy hermosos

    


    Tampoco he comentado nada de los escenarios, a parte de que, en su mayoría son 3d, lo cual cambia mucho la jugabilidad (obviamente) comparándola con entregas anteriores, ahora podremos desplazarnos por los escenarios de maneras más variadas, aunque las 2d no fueron nunca un obstáculo en ese sentido, ahora, los ascensores y cosas similares tienen más sentido, porque además, la cámara, nos acompañará en todo momento... y aquí tengo una pequeña queja. El juego es genial, seguro que está entre mis diez favoritos, pero la cámara, en ocasiones, es una lata. Los personajes se mueven libremente, no hay control tanque, lo cuál es bueno, pero cuando tienes cambios bruscos de los ángulos de cámara, puede resultar molesto, porque puedes encontrarte caminando hacia abajo para que, luego, la cámara cambie de ángulo y ahora, al seguir pulsando abajo, vuelves a salir a la pantalla anterior porque ahora "abajo" está "arriba". Y eso es algo que pasaba bastante en aquella época, los programadores no parecían pillar la mecánica a las cámaras fijas con cambios de ángulo... y otra cosa rara que pasaba, era que, Tidus, en ocasiones, se "enganchaba" al moverlo en una dirección, y al cambiar de ángulo, seguía caminando en esa misma dirección, y debías pulsar varias veces hacia otro lado para que el personaje reaccionara. Que a ver, no es algo demasiado grave, estamos hablando de un rpg en escenarios semiabiertos, pero es algo que, en un juego de acción, sería un fallo enorme.


Aquí, mirando cómo le ha dado un telele a uno de los enemigos

    


    ¿Qué más?... ah, claro. El juego, aunque en un principio no lo parezca, en realidad es una crítica a los sistemas religiosos dogmáticos... he dicho que no quiero hacer muchos spoilers, pero en FFX hay una "iglesia" muy poderosa, que es la que dicta que, usar máquinas, es "pecado" ya que por abusar de ellas apareció sinh y... bueno, luego descubriremos cosillas muy... interesantes. De todas formas, también hay un componente místico muy importante, con escenas oníricas e incluso con presencias "espirituales". De hecho, según el "lore" de Final Fantasy X, los "monstruos" con los que combatimos, se forman con los espíritus de los muertos que no fueron al "etéreo" (algo así como el cielo cristiano, para que nos entendamos). Y eso, además, está conectado con los invocadores, ya que una de sus labores es "enviar" a los muertos al etéreo para que no se conviertan, lo cuál podremos ver en una espectacular escena en cierto momento, muy emocionante y emotiva, sobre todo cuando ya has jugado el juego y entiendes la importancia de aquel hermoso baile.


Lo que muchos querríamos que Lulu nos dijera...

    

    Quiero comentar un poco la ambientación del juego, ya que esta me parece muy interesante. Hablaré sólo de Spira, el mundo en el que se desarrolla la historia, no el mundo del que viene Tidus (mejor no digo nada, que son muchos spoilers equisde). Pues en dicho mundo, existe la creencia de que, como ya he dicho, usar máquinas, es lo que hizo aparecer a Sinh (por cierto, Sinh, sin la hache del final, significa PECADO en inglés, ¿casualidad?, no lo creo). Por ello, nos encontramos en un mundo de fantasía sin demasiadas máquinas (hay pueblos, como los albhed que sí las usan), pero que sí utiliza cierto nivel de tecnología, de hecho, existe la "televisión" (o algo similar), pueden grabar sonido y vídeo en unas esferas que luego, en FFX-2, tendrán muchísima más importancia, hay armas "de fuego" y más cosillas, pero por lo general, las gentes de Spira tienen vidas sencillas en las que, la tecnología avanzada, no tiene prácticamente ninguna influencia. El clero tiene un gran poder en Spira, son los que, en principio, lideran la lucha contra Sinh, y son los que "guían" a los invocadores y aspirantes en su viaje, ya que es en los templos dónde "duermen" los eones que, los invocadores, deben despertar si quieren continuar su viaje. Con el tema de una iglesia contra las "máquinas", en realidad podemos entender cómo se critica a la iglesia, por cómo esta teme e impide los avances científicos y tecnológicos, cosa que, por ejemplo, se achacaba a la iglesia católica en el pasado. Una cosa muy interesante, es que, en todo momento, el jugador, tiene una sensación de inminente peligro, al menos la primera vez que juegas, ya que este no es el típico juego en el que sabes que hay un enemigo enorme al que vencer y que te lo encontrarás al final del juego y poco más, no, aquí, Sinh es un personaje más (y más importante de lo que nos pensamos al principio, ojo), un ser que es capaz de desprenderse de trozos de su propio cuerpo para enviarlos a combatir... ¿y cuál es el destino de Yuna?, enfrentarse a Sinh, por ello, a lo largo del juego, deberemos enfrentarnos varias veces a "porciones" de Sinh (por llamarlos de alguna manera), incluso en cierta parte de la historia, se nos conmina a luchar con un "hijo" de Sinh para atraerlo a una emboscada, ¿spoiler?, NO SALE BIEN. Por ello, creo que hicieron muy bien lo de Sinh, quizás me recordó un poco a Sefiroth y Jénova en FFVII, solo que en FFX hablamos de trozos de un mismo ser. Es más, llegaremos a tener más de un enfrentamiento con Sinh durante nuestra aventura, aunque no serán combates demasiado complicados, en realidad. También seremos "víctimas" alguna vez del poder de la "iglesia" de Yevon, pero eso ya sería entrar en terreno de spoilers. Y algo que me resulta muy curioso es el uso recurrente del agua. ¿Os acordáis del meme aquel sobre un juego de Pokémon en el que decían que había "demasiado" agua?... pues aquí sucede algo similar. Para empezar, el blitzbol se juega bajo el agua... o mejor dicho, dentro de una esfera de agua, tendremos que combatir, muchas veces, en combates submarinos, aunque normalmente sólo con Tidus, Waka y/o Rikku, lo que tiene toda la puta lógica del mundo si lo piensas. Además, parece que la gente no se ahoga debajo del agua (?), si veis la escena del beso de Tidus y Yuna entenderéis lo que digo, y sí, hay mucho mar, mucho agua, muchas zonas costeras... siempre tienes la sensación casi como de estar siempre en una isla, sobre todo al principio. Imagino que será algo simbólico, nada es "porque sí" en un juego de estas características. Digo más, hay alguna que otra zona en la que podemos bucear, no muchas, y no importa el tiempo que pasemos bajo el agua, nuestros personajes no se ahogarán. Por lo demás, la ambientación en sí es muy agradable, aunque estamos en un mundo en el que todos saben que, en cualquier momento, puede aparecer Sinh y destruirlo todo, está lleno de gente repleta de esperanza, pero también hay un punto de tristeza y melancolía que contrasta con esa esperanza, lo que hace que, nosotros mismos, seamos incapaces de creer que, el juego, pueda tener un verdadero "final feliz".

    Antes de ir a la parrafada final... Ya he comentado que Final Fantasy X no tenía un "mundo abierto" como tal, y eso condicionaba el cómo nos movíamos por dicho mundo con el "cacharro que vuela", pero lo que no he dicho, es que nos daban el "trasto volador" estando ya cerca del final, lo cuál resulta bastante frustrante llegado a cierto nivel, ya que las zonas están bastante alejadas, y nos vemos obligados a dar unas buenas caminatas... eso cuando el camino no estaba bloqueado o, la historia, no nos permitía entrar, y es cierto que no había muchos motivos para volver atrás... en cuanto a la historia se refiere, ya que había cosillas que sí se podían farmear y para lo que, obviamente, debíamos ir a zonas muy lejanas en ocasiones, e incluso inalcanzables sin el trasto que vuela.


Los que no saben :) Los que sí saben :'(

    


    Y bueno, para ir terminando. Si queréis jugarlo, os recomiendo la versión HD, ya que no sólo se ve mejor, sino que además tiene algunos extras (incluso jugables), además de venir acompañado de FFX-2 que, no os dejéis engañar, es mejor de lo que pueda parecer en un principio, ya hablaremos de ello cuando toque. 

    Creo que podría seguir, y seguir, y seguir hablando de Final Fantasy X sin repetirme, podría profundizar en los eones hablando de sus versiones oscuras, podría hablar más de las pruebas, de los enemigos secretos, de los chocobos (sí, también aparecen), podría hablar de las escenas que se convirtieron en memes... Pero preferiría que la gente probara el juego por si mismo. No creo que haga falta decirlo, pero el juego salió años más tarde en una edición hd junto a Final Fantasy X-2 (del cuál hablaré algún día, y puede que de más de una sorpresa a alguno), dicha edición, a parte de mejoras gráficas, tenía alguna que otra cosilla extra. No quiero terminar sin hacer una pequeñísima alusión al final de este juego... si no lloras, es que NO TIENES ALMA. Más tarde, y esto es algo que todos sabemos, se acabó lanzando una segunda parte (la primera vez que un FF tenía una secuela oficial). donde podíamos "arreglar" el final de FFX, que era un final "bueno", pero con un giro muy triste. Amo este juego, lo adoro. Amo a Yuna, a Tidus, Waka, Rikku, Lulu a Auron El Puto Amo e incluso a Kimhari. Adoro el romance entre Yuna y Tidus, la elegancia y el buen gusto con el que se lleva su historia, las escenas de vídeo, el tablero de esferas... yo qué sé. Entiendo que no es un juego perfecto, quizás su inicio puede hacerse un poco pesado, sobre todo cuando ya lo has jugado muchas vece y lo que quieres es "ir al lío". No te sientes "libre" prácticamente hasta el final del campeonato de blitzboll, lo cuál puede suponer unas tres horas, dependiendo de lo mucho (o poco) que te enrolles. Es cierto, también, que su desarrollo puede ser demasiado lineal, no hay zonas que puedan considerarse "laberínticas" más allá de una o dos bifurcaciones, pero también es cierto que, eso, es algo que fue evolucionando a medida que la saga avanzaba, si pruebas un FF de los primeros, comprobarás lo que quiero decir. Y yo diría que no tengo mucho más que comentar, a parte de que es uno de los FF más queridos y, cuyo final, hizo llorar a mucha gente, incluso recuerdo a una amiga cuya madre le pilló llorando y le preguntó qué le pasaba, y esta le contestó "spoiler, spoiler y más spoiler"... Pues sin más, que es de esos juegos que debéis jugar, y de los que me hacen pensar que es una lástima el que haya gente que no le guste los RPG por turnos, ya que tiene mucho, MUCHO, que ofrecer. Así que, ¡hasta la próxima! 


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