Ahora que me ha dado por ver la saga Toy Story con mi sobrina de cuatro años, me he acordado de la maravilla adaptación al videojuego que se hizo del primer juego para la consola de dieciseis bits de Sega, la Mega Driva, obviamente. Juego que, en su día, sólo jugué alquilado UNA VEZ, y que sin embargo me dejó un muy buen sabor de boca.
Debo decir, que yo vi la primera Toy Story en el cine, fue una época maravillosa para la industria cinematográfica, los 90 fueron algo así como una extensión de los 80, una época en la que la creatividad y la calidad eran la tónica habitual en Hollywood, no como ahora, por cierto, y la animación por ordenador mostró solo una pizca de lo que podía llegar a ser en el futuro. Una animación en la que los personajes poseían una dimensión más (literalmente), y en la que los animadores tenían mucho mayor control a la hora de manipular personajes y escenarios. Toy Story nos alucinó a todos los que la vimos en el cine. Por mi edad, cuando yo vi esta película, ya tenía poco más de veinte años, así que no tenía juguetes en si, por eso, cuando llegué a mi casa tras ver la película, sentí cierta nostalgia de mis viejos juguetes, eché treméndamente de menos mis "Playmobil", mis muñecos de Star Wars, mi Ironman y mi Capitán América, mi jodido barco pirata de Playmobil (sí, yo era mucho de Plaimobil), y tantos y tantos juguetes, muchos acabaron regalados, otros "desaparecieron"... sí, un día, fui a buscar la bolsa en la que guardaba mis famosos Playmobil, y vi que había desaparecido, mi madre juraba y perjuraba que no sabía nada... pero todos sabemos que, cuando nos desaparecen juguetes, estos no lo hacen solos, ¿cierto? Sea como sea, al llegar a casa tras ver Toy Story me sentí bastante triste y nostálgico, ya que la película humanizaba a los juguetes de tal manera que empatizabas con ellos de una manera... pero espera, ¡que este es mi blog de videojuegos!
![]() |
En el "Telesketch" de arriba a la izquierda te daban pistas sobre qué hacer... cosa de la que me acabo de dar cuenta ahora :'( |
La película me encantó, no sé si quedó suficientemente claro en el párrafo superior, y lo que vi en las revistas de la época del juego no me desagradó, mostraba unos gráficos un tanto extraños, nunca me acostumbré del todo a los gráficos prerrenderizados en aquellos tiempos, pero unos gráficos muy fieles a lo que vimos en la película, y con un nivel de detalle que parecía imposible para la Mega Drive, así que un día, lo vi en mi videoclub de confianza y lo alquilé... y oye, el jueguecito no estaba nada mal. A ver, no voy a descubrir nada, cualquiera que haya jugado el juego te dirá más o menos lo mismo.
El juego, aunque es un plataformas bastante típico (no tanto, ahora me explicaré), también tiene niveles de conducción y mecánicas bastante originales. Como cabía esperar, el juego sigue, de manera más o menos fiel, la historia de la película. En el primer nivel, por ejemplo, deberás recorrer la habitación de Andy, y liberar a los soldados de juguete, para coger la radio y descubir qué le han regalado al susodicho Andy. En el segundo nivel, deberemos asegurarnos de que todos los juguetes estén guardados en su lugar, y en el tercero tendremos una especie de reto con Buzz Lightyear... y así con todos los niveles, que representan escenas de la película y en los que deberemos realizar alguna tarea para avanzar.
![]() |
Con la radio que está en la mesita podemos escuchar Carrusel Deportivo, para saber si, el Albacete, jugará la próxima Champions League |
Ese simple detalle, el tener que realizar ciertas tareas, era lo que diferenciaba Toy Story del resto de juegos plataformeros de la época. En Toy Story no eran raros los niveles pequeños pero en los que deberíamos explorar y buscar qué es lo que debemos hacer, que a ver, si viste la película, pues más o menos tendrás una idea, como sucede en el primer nivel, ya que en el momento en el que ves el bote de los soldados y la radio, ya te haces a la idea de lo que tienes que hacer. Pero también es cierto que, si no viste la película, y no eres muy observador, puedes terminar dando muchas vueltas a lo loco. Lo bueno de esto, es que la jugabilidad es muy variada, no todo es saltar de plataforma en plataforma, incluso tendremos un nivel de "sigilo" en el que deberemos manejar a los personajes mientras estos usan envases vacíos para que no los vea la gente.
A lo largo de la aventura, no sólo nos encontraremos con otros personajes de la película, como el señor Patata, sino que también nos cruzaremos con otros juguetes, algunos de los cuales serán "hostiles" y con "hostiles" quiero decir que se moverán por el escenario y nos quitarán algo de vida si los tocamos (o ellos nos tocan a nosotros). Por suerte, aquí no morimos con un solo toque, sino que podremos recibir varios golpes antes de perder una vida, cosa que agradecí mucho en su día (el juego me pareció terriblemente difícil, cosa que ha cambiado, por cierto), en ocasiones, nuestra única defensa es intentar esquivar a los enemigos, pero en otros podremos detener, temporalmente, a los juguetes lanzándoles el lazo que tiene Buddy en la espalda, ya sabéis, ese que hace que hable cuando tiras de él.
![]() |
Las viejas "cinemáticas" solían ser escenas estáticas... aunque no siempre... no siempre |
El plataformeo del juego, en realidad, es bastante sencillo, ya que como dije, cadda nivel requiere cierta tarea para ser completado, y la dificultad se encuentra, en ocasiones, en los enemigos o en tener que realizar una tarea en tiempo límite, como el nivel en el que debemos recoger todos los juguetes. Aun así, el control del personaje es muy bueno, sus animaciones también están por encima de la media y se hace muy agradable el manejo. Es cierto que el personaje tiene cierta inercia, pero es menor a la de otros juegos, por lo que los saltos de precisión son más sencillos de realizar.
El juego, al igual que la película, se desarrolla siempre desde la perspectiva de los juguetes, y no solo en el sentido de que son los protagonistas, sino de que estos tienene una gran relevancia en el desarrollo del juego. Podemos utilizar diferentes tipos de pelotas para saltar más altos, deberemos derribar bloques para abrir el paso a otros juguetes, deberemos usar una grua (de juguete)... y todo eso en los dos primeros niveles. Me pareció increíble como hicieron eso en aquella época, como le dieron tanta personalidad a un videojuego inspirado en una película sobre juguetes, es más que obvio que hubo mentes muy creativas, y con ganas de hacer las cosas bien, detrás de este videojuego.
![]() |
Siempre fue mi personaje favorito... sí, me refiero al gorrino |
Como dije más arriba, en su día me pareció un juego muy difícil, pero creo que esto fue por mis tremendas prisas para pasármelo, solo lo alquilé una vez, y ya sabemos que las ansias son muy malas cuando se quieren hacer las cosas bien. Por ejemplo, hoy mismo, cuando estoy escribiendo esto, he jugado un poco para hacer las capturas, y sin jugar especialmente bien, me he llegado al tercer nivel, ese en el que tienes que "correr" contra Buzz (no hice captura porque quería ganar XD), por lo que creo que, si me pongo en serio, lo puedo terminar en una tarde (o dos), al contrario que otros juegos inspirados en películas de animación (como el Rey León, quizás algún día en este blog, o Aladdin, ese sí que está aquí), la dificultad no parecía ser el objetivo de este juego, y si lo era, lo plantearon de otra manera. Las tareas eran fáciles de realizar, pero si eras torpe con los mandos, los enemigos te podían quitar alguna vida, lo cual no resultaba tan frustrante como en otros juegos, por cierto.
![]() |
Final del segundo nivel, todos los juguetes en su sitio, y Buddy en la cama de Andy, todo va bien... por ahora |
Practicamente no he dicho nada del nivel técnico del juego, el cual es muy alto, graficamente no parece un juego de 16 bits gracias a los gráficos prerenderizados, el sonido no desentona, la música está bastante bien y hasta tenemos voces digitalizadas, cosa que no solía manejar muy bien la Mega Drive, la verdad sea dicha. En cuanto al número de niveles, este es bastante alto, pero recordemos que su desarrollo podía ser bastante corto si sabíamos lo que teníamos que hacer. Algo similar a lo que pasaba en Sonic si solo corríamos hasta el final de cada nivel, pero la variedad de desarrollos suplía eso con creces, ya que el juego no caía nunca en la monotonía y siempre sabía sacarte una sonrisa. Como curiosidad, el juego salió también para Super Nintendo como para PC, en ambos juegos se eliminó un nivel (diferente en cada versión), por lo que la versión más larga es la de Mega Drive.
En definitiva, nos encontramos ante un plataformero muy variado y original inspirado en una de las películas más entrañables de la historia, yo lo jugué siendo ya un "joven adulto", pero mi hermano sí lo juguó siendo niño, por lo que seguramente su experiencia fue diferente a la mía, que aun siendo agradable, quizás no tuvo ese sabor especial que da la niñez. No veo necesidad de alargar mucho más esta entrada, como digo, solo lo jugué un sólo día, pero su calidad hizo que, casi treinta años después, siga recordándolo y esté hoy aquí hablando de él. Jugadlo, si sois adultos que (aún) tienen prejuicios sobre juegos inspirados en películas sobre juguetes, tirad esos prejuicios a la basura, y si tenéis hijos, nietos, sobrinos o lo que sea, este es un juego perfecto para que entren en este mundillo. Así que, sin nada más que añadir, ¡hasta la próxima!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Tienes algo interesante que decir?. Recuerda ser educado y respetuoso.