Street Fighter Alpha 3

    Ya dije en cierta ocasión que soy bastante fan de Capcom, me encantan sus juegos, desde las recreativas de monedas hasta el Resident Evil más moderno (spoiler, cuando empecé a escribir esto, el Resident Evil "más moderno" era el 6... ), y hoy toca hablar de un juego que vio la luz por primera vez en una máquina de monedas, como era de esperar, y en este caso hablaremos de un juego de la saga Alpha, y me refiero a Street Fighter Alpha 3.

    Para ser sinceros, yo me hago un lío con el orden cronológico de los diferentes juegos, pero para no hacernos un lio, solo diré que los juegos de la saga Alpha trascurren entre Street Fighter y Street Fighter II, aunque la realidad es que importa bastante poco, porque según la propia CAPCOM no hay un canon "real" establecido... o sí, no sé... bah, da igual

    No hace falta decir que SFA3 es un juego de lucha 2D, ni que posee una cantidad de personajes para aburrir, pero sí que tengo que decir que, al menos para mí, es el mejor de la serie, tanto en gráficos, escenarios, cantidad de personajes, sonido... todo estaba diseñado para dejar al jugador con la boca abierta.

Los diseños de los personajes recordaban a los de la película de animación de los años 90

    Empecemos por los personajes, el SFA3 original, o sea, el de recreativa, contaba con la friolera de veinticinco personajes jugables, la versión psx incluye algunos más. A los habituales Ryu y compañía se le sumaban personajes de otros juegos de Capcom, como Guy, Sodom o Rolento, todos de Final Fight, más alguno que otro original de la saga. Todos ellos poseían un diseño impecable y gozaban de unas animaciones más que dignas, recordemos que estamos hablando de personajes 2D. Se podía decir que Capcom había alcanzado casi la perfección en lo que a gráficos basados en sprites se refiere, y los personajes además de tener un diseño prácticamente perfecto, poseían también unas animaciones a tono con ésos diseños.

    Todos los personajes poseían una cantidad considerable de técnicas especiales, como era de esperar, no tantas como para tener la sofisticación de Tekken pero sí las justas para que los personajes fueran divertidos de controlar. Peeeero antes de entrar en materia debo aclarar ciertas cosas. Casi todo (por no decir todo) lo que voy a comentar aquí, es en realidad aplicable a la versión de PlayStation, ya que las diferencias jugables, y de dificultad, son bastante importantes entre ambas versiones. Tanto es así, que aunque seáis un experto en la versión de PlayStation, quizás os encontréis con problemas a la hora de jugar la versión de recreativa, ya que esta suele ser más... eeeeh, "ladrona", por decirlo de alguna manera. Obviamente, los juegos de recreativa tenían una dificultad superior a sus conversiones domésticas (ports, que se dice ahora), porque estaban diseñadas, ¡oh, sorpresa!, para sacarte todas las monedas posibles, mientras que las versiones de consola eran más sencillas porque ya te habías gastado el dinerito comprando el juego. Dicho esto, la importancia de este juego en mi vida como aficionado a los videojuegos es tal, que creo yo merece que cuente cómo llegó a mi vida.

Rolento se ha encontrado un euro en el suelo, y Ken se va a su planeta, porque le necesita

    La vida es muy curiosa, y en ocasiones, cuando se cierra una puerta, se abre una ventana... Resulta que un día, de tanto usarla, mi pobre PlayStation murió, dejó de leer discos de ningún tipo. Más o menos me conformé porque aún poseía mi vieja Mega Drive y, al menos, podía echar alguna partidita al Street Fighter II' Special Champion Edition. Pero un día, vino mi hermano proponiéndome un trato. Un amigo suyo tenía una PlayStation (chipeada) a la que no le funcionaba uno de los puertos para los mandos, y preguntaba si estaba dispuesto a hacer un intercambio... me lo pensé un tiempo, y aunque a veces me arrepiento de lo que hice, al final, tal y como me fueron las cosas en la vida, habría dado igual lo que hubiese hecho, ya que igualmente habría "perdido" mi Mega Drive y mis juegos. Pues la cosa es que accedí al intercambio... Sí, sé que algunos se llevarán las manos a la cabeza, que a día de hoy una Mega Drive funcional es casi un tesoro. Pero leed más arriba, literalmente habría dado igual, por cosas de la vida, me habría quedado igualmente sin ninguna consola. Sigamos. La cosa es que él me daría sus juegos, y yo le daría los míos a él, y entre los que él tenía estaba el ¡oh, dios mío!, Street Fighter Alpha 3. Recuerdo que cuando mi hermano trajo la consola, me comentó con cierta tristeza que yo, al menos, no me despediría de Street Fighter (sabía que era mi juego favorito y que era el único que realmente me dolía). Y... ¿Qué puedo decir? Yo conocía la saga Alpha por las revistas, no había jugado a ninguno de sus juegos, ni siquiera los había visto en recreativas, así que no sabía qué esperar, y bueno, aquello fue como ir al cielo de los juegos de lucha. Tenía montones de personajes (aunque faltaba alguno que me hubiera gustado que estuviera, como Guile), los gráficos eran maravillosos, la música muy buena, más moderna que la de Street Fighter II, obviamente, pero de mayor calidad sonora debido a los avances técnicos.

Lo que más que gusta de SF es el realismo

    Lo cierto es que todo lo que puedo decir de éste juego son cosas buenas, desde la jugabilidad hasta los súper combos, pasando por el rediseño de los personajes, todo era prácticamente perfecto para mí. Una de las cosas que más me gustó, por ejemplo, fue que Ryu y Ken eran personajes bastante diferentes, no eran solo dos "skins" diferentes pero con las mismas técnicas. Y ya sé que desde Street Fighter II ambos tenían sus diferencias, pero ahora eran mucho más notables, tenían incluso golpes o súper combos diferentes, dotando a ambos personajes de más personalidad. Recordad que, por aquella época, no había jugado a ningún Alpha, por lo que el tema de los Súper Combos era algo nuevo para mí, lo más parecido que había visto eran los "supers" de Soul Blade y poco más, y me parecieron una pasada aunque siempre he sido un jugador "tradicional" que prefiere combos "manuales" por así decir, de hecho, aún a día de hoy no me gustan demasiado. Pero bueno. En éste caso, el juego te dejaba elegir entre tres tipos de súper combos, o más bien, de estilo de combate, siendo bastante diferentes los unos de los otros y repercutiendo incluso en el arsenal de golpes de cada personaje. Lo cierto es que yo casi siempre jugaba con el mismo, por lo que no entiendo muy bien cómo funcionan los otros dos. Digamos que el que yo utilizaba era el A-ISM, ése que tenía tres niveles (tres barras, por así decir), que se iba llenando a medida que pegabas o te pegaban. Una vez tuvieras una barra o más podías utilizar un súper combo. Al igual que en otros juegos similares, podías decidir cuantas barras gastar, y a más barras usaras, mayor era el daño infligido al contrario.

Dan teniendo el mejor día de su vida

    Las diferencias jugables para con SFII (creo que diré esto muchas veces a lo largo de esta entrada XD) eran bastantes, no sólo estaban los súper combos, también teníamos una barra de bloqueo, la cuál se iba vaciando cada vez que bloqueábamos, aunque se rellenaba poco a poco. Eso sí, si el contrario nos vaciaba la barra, nos rompía la guardia dejándonos aturdidos unos segundos estando mientras a su merced, además, el tamaño de la barra disminuiría un poco... Me pregunto si alguno de los programadores de éste juego acabó trabajando en Dark Souls. Otra diferencia más a la que tuve que acostumbrarme, era al hecho de poder bloquear en el aire, ya que había "malabares", vamos que te podían hacer "combos" mientras estabas en el aire, y poder bloquear ayudaba. Cosa que yo ya había visto en Tekken o Soul Blade (lo de los malabares) pero que era la primera vez que lo veía en un juego 2d. También podías, por ejemplo, pulsar dos botones para caer de pie si te golpeaban en el aire. A parte de todo esto, el juego también te ofrecía la posibilidad de escoger entre dos velocidades, yo siempre usaba la más lenta, que aún así, resultaba como una velocidad Turbo en la saga "normal".

Aquí podíamos equipar las habilidades

    La historia del juego no la entendí muy bien XD, ya que Bison volvía a ser el enemigo final, sólo sé que, al parecer, pretendía lanzar unos misiles o yo qué sé para destruir una ciudad... ni idea, sólo sé que en algunos finales Bison conseguía su objetivo, pero da igual, todos sabemos que la historia no suele ser lo más importante de la saga. Lo que sí me gustaría decir, es que cada personaje tenía su propio final, de hecho, creo que podían tener dos finales, uno bueno y otro malo dependiendo de si derrotabas a Bison en el combate final (aunque no tengo muy claro si eso era sólo en la versión de recreativa, hace mucho que no juego como para acordarme de ese detallito, y para las capturas no me lo voy a terminar XD). Lo que sí es cierto, es que al haber tantos personajes, algunos compartían final, se supone que viajan juntos o yo qué sé, por lo que el final es el mismo, o casi. También se reciclan escenas, sobre todo la escena de los misiles. Así que aunque cada personaje tenía su final, había escenas que te las tragarías sí o sí. Como es habitual en la saga, había finales serios y otros humorísticos, lo cuál era divertido pero, obviamente, restaba "seriedad" a la historia, pero como suelo decir, no pasa nada, aquí no hemos venido a que nos cuenten una historia.

Dan teniendo el peor día de su vida

    Me gustaría volver con el tema de la jugabilidad, ya que es lo más importante del juego. Aún jugando con la velocidad mínima, el juego se movía un pelín más rápido que SFII, como digo, equivalía a una velocidad turbo, de hecho, se llama Turbo 1, por lo que me costó un poco acostumbrarme. Con todo lo que el juego ofrecía jugáblemente, en un primer momento me sentí abrumado. Ya no tenía sólo los golpes especiales, ahora tenía los especiales, los súper combos, los "malabares", el bloqueo en el aire, la barra de bloqueo... demasiadas cosas a las que estar atento... pero me encantó, me enamoró. Una vez que me hice a las mecánicas y empecé a pillar los patrones de los enemigos hasta el punto de llegarme a Bison, fue cuando comencé a disfrutar de verdad éste juego. Ya me llegaba a Bison, aunque éste me solía dar unas palizas de campeonato. Yo me imaginaba que Bison sería complicado... pero hostia, en mis primeros combates no le gana ni un round... hasta que entendí cómo funcionaba el maldito, una vez pillado, me resultaba hasta fácil.

Siempre hay tiempo para aprender geografía, ¡mira, desde aquí se ve mi casa!

    Quiero detenerme un poco en los personajes. Ya he dicho que había muchos personajes, pero lo que no he dicho es que a parte de personajes de otros juegos, aquí regresaban algunos del primer Street Fighter, como el pupilo de Sagat, un personaje bastante interesante de utilizar y que luego veríamos también en otros juegos de la saga principal. También dije que Guile no estaba en éste juego (aunque sí aparece en la versión de PSP), pero para eso teníamos a Charlie... que era el amigo que él quería vengar en Street Fighter II y que utiliza un sistema de combate prácticamente idéntico, aunque con las suficientes diferencias como para no impedir que Guile estuviera presente, al fin y al cabo tenemos a Ryu y Ken, que también utilizaban técnicas muy parecidas, también teníamos a un par de "muñecas", luchadoras controladas por Bison y que también hacían de enemigas, las dos a la vez, en combates "de historia" para algunos personajes. Resumiendo, que tenía muchos personajes que tenían su espacio en el "lore" clásico de la saga y con los que resultaba curioso jugar.

Balrog tenien... bueno, ya me entendéis

    Y bueno, a parte de una jugabilidad casi perfecta, unos gráficos increíbles, unas músicas más que buenas... ¿Qué más tenía éste juego que ofrecer? Pues mucho. Hablando, como ya he dicho, de la versión de PlayStation, el juego tenía diversos modos de juego, para mí, el más interesante era uno que llamaré "modo historia" (creo que se llamaba algo así como "World Tour"), que era muy del estilo del modo que tenía Soul Blade. Escogíamos a un personaje, y debíamos superar diversas pruebas con él a lo largo del mundo. Desde derrotar a un enemigo cualquiera a vencer enemigos SÓLO con súper combos y cosas así, como digo, muy al estilo de Soul Blade. La diferencia, es que aquí los personaje suben de nivel y consiguen diversas mejoras que podemos equipar, desde rellenar mas rápido la barra de súper a hacer más daño o bloquear automáticamente. Lo cierto es que podías "chetar" mucho a tus personajes, facilitando MUCHO el juego contra la máquina, y no digamos contra un amigo, de hecho, yo diría que sería incluso injusto utilizar un personaje chetado contra uno básico, la diferencia es ridículamente alta.

    Otro modo que no podía faltar era el "survival", ya sabéis, ése modo en el que debíamos derrotar a tantos enemigos como pudiésemos con una sola barra de vida... solo que aquí era un tanto "especial". Y es que en esta ocasión, deberíamos enfrentarnos a varios enemigos a la vez, eso sí, con barras de vida más cortas (que se irán alargando a medida que avancemos combates), haciendo que este fuera el primer Street Fighter en el que podíamos luchar a la vez contra dos (o más) personajes a la vez, y sí, suena y se hace muy raro, pero lo cierto es que es muy divertido cuando le pillas el gusto, además, también hay un modo en el que podremos ser dos contra un solo enemigo, la llamada "Batalla Dramática" (o algo así). La "Batalla Dramática" era un modo bastante espectacular, que era un guiño a la película animada de los 90, en la que podíamos luchar dos jugadores A LA VEZ contra Bison manejando a Ryu y Ken, como sucede en dicha película. 

Se me hizo muy raro jugar a un SF con tiempos de carga, al menos no eran tan grandes como en otros juegos

    

    Obviamente también teníamos el típico modo entrenamiento, donde podíamos probar los movimientos de los diferentes personajes, pudiendo personalizar la sesión de entrenamiento. Lo cierto es que entre los modos de juegos, la cantidad de personajes, la posibilidad de personalizar a los mismos, los diferentes estilos de "combo" y demás, éste resultaba ser uno de los juegos de lucha más completos y complejos de la época, que sí, no era un Tekken en lo que a movimientos se refiere, pero no tiene nada que envidiar en lo que a jugabilidad y diversión se refiere. No quiero terminar esta entrada sin contar lo espectacular que resulta el combate final con Bison. Al contrario que en SFII, en el que el escenario es un templo budista que más que urgencia nos transmitía calma, aquí nos enfrentamos a Bison en un bosque en medio de una tormenta. Podíamos ver los árboles azotados por el viento, la caía lluvia de vez en cuando y los truenos iluminaban la pantalla. Y la música, la música de éste combate es también mucho más memorable, y mira que me gusta la banda sonora de SFII, pero el tema final es increíble

    Algo que casi se me olvida, hay diversos personajes que, por lore, ¡no se enfrentan a Bison! en el final, sino que luchan contra otro personaje, aunque no son muchos casos, he de decir. Otra cosa que no quiero que se me olvide, es que el juego, mas o menos, nos cuenta una historia, por eso, cada ciertos combates, nos enfrentaremos a enemigos fijos, que dependerán de cada personaje, con los que tendremos una pequeña charla antes de combatir. Una curiosidad divertida, es que también poseía algunas animaciones especiales cuando dos personajes que se conocían se tenían que enfrentar, no llegaba al nivel de otros juegos que utilizaban esa misma mecánica, como la saga King of Fighters, pero era una curiosidad muy divertida.

    Hay algo de lo que apenas he hablado, y es de la calidad sonora del juego, no solo de la música, que gracias al CD y al chip de sonido de la PlayStation sonaba genial, sino a las voces, tanto del "narrador", que solía decir algo antes de cada combate, como las de los personajes, entendiéndose mucho mejor lo que dicen... al menos los que hablan en inglés, e incluso los golpes y demás efectos suenan muy bien, dando contundencia al juego y aumentando más su espectacularidad. Y lo mismo sucede con los efectos gráficos a la hora de realizar algún ataque especial o super combo, siendo un juego muy espectacular en ese sentido.

    Éste juego me gustó tanto que no quiero dejarme nada XD, por lo que podría estar escribiendo horas y horas sobre él, pero tampoco es plan. Decir que, evidentemente, el juego original, el de arcade, fue porteado a diferentes consolas, como las ya nombradas PlayStation y PSP, siendo quizás esta última la más completa al tener aún más personajes. Tiene incluso una versión para Game Boy Advance que aunque da bastante el pego gráficamente, no es la mejor opción para jugarlo... y lo mismo podría decirse de la recreativa. Como dije más arriba, el arcade es bastante "ladrón", haciendo que, obviando a Ryu y Ken (y algún que otro personaje), resulte bastante complicado completarlo, al punto de llegar a ser desesperante en algunos casos. Pero claro, a día de hoy, con la emulación, tampoco es tanto problema, ya que no tendrías que dejarte la paga para aprender a jugar con tu personaje favorito. Porque esa es otra, hay tantos personajes en el juego, con tantos estilos de lucha y con diferentes fortalezas y debilidades, que escoger un favorito, fuera de los típicos, es complicado. Y ése es otro problema que tiene el arcade, que hay personajes que no están bien equilibrados, y por eso es tan complicado terminar el juego con ellos, sin embargo, en consola, la cosa es muy diferente, todo está mejor trabajado (el juego no está programado para robar), por lo que el aprendizaje es más divertido porque te sientes menos estafado. Si queréis podéis probar las versiones de recreativa y luego alguna de consola para comparar, no es sólo el hecho de la dificultad, sino que como digo, el juego te "roba" en recreativa y algunos personajes están demasiado desequilibrados... Pero si os da pereza, podéis visitar el canal de YouTube llamado "Con Cinco Duros", en el que podéis ver al bueno de Nestor pasarse el juego con TODOS LOS PERSONAJES, sufriendo como un cabrón con algunos, para luego jugar a la versión de PSP y entender por qué hay tanta gente que ADORA este juego. Porque a ver, entiendo que las recreativas son un negocio y están hechas para robarte lo más posible. Pero Street Fighter II, aunque te robaba a veces, no era tan injusto en su versión recreativa (obviamente todo depende del nivel de dificultad de la recreativa... porque sí, las recreativas tenían selector de dificultad). Y no me quiero alargar más. Street Fighter Alpha 3 reavivó la llama de la lucha en mí, me recordó por qué amaba esta saga, de hecho, le eché muchas más horas que al Ultra Street Fighter IV, ya que mientras las novedades de la saga Alpha me gustaron, no pasó lo mismo con el USF IV, que de hecho, hasta gráficamente lo veo feo (no malo, feo), con personajes con proporciones monstruosas, teniendo cualquier personaje femenino unas manos más propias de un culturista que de una mujer, y no vengáis conque "es que son luchadoras", las proporciones son demasiado exageradas, cosa que puede quedar bien en un juego 2d, pero que en un juego poligonal queda feo. Pongo el ejemplo de las sagas de Namco, Tekken y Soul Calibur. Los personajes suelen tener proporciones "realistas", dejando la "desproporción" para los seres "monstruosos" o demoníacos. Mientras que en Street Fighter IV Chun-Li tiene unos muslos más propios de un caballo de tiro que de una luchadora. Pero bueno, no estamos aquí para hablar de los muslos de Chun-Li... o sí, para todo hay tiempo... lo que quiero decir es que, Street Fighter Alpha 3 llevó los gráficos de la saga a lo más alto, siendo un juego más que digno a día de hoy, de hecho, para mí sigue siendo uno de mis favoritos. Buenos gráficos, música más que buena, jugabilidad excelente, muchos personajes, escenarios preciosos en ocasiones, muchas opciones de juego, personalización de los personajes... y todo embutido en un CD piratón que llegó de casualidad a mi vida. Esta vez no es que vaya a recomendar que lo juguéis, es que EXIJO que lo hagáis, sobre todo si os gustan los juegos de lucha clásicos. Pues eso, ¡hasta la próxima!